Si bien el concepto no es nuevo, la OIE apoya el enfoque de “Una sola salud” como un planteamiento colaborativo y global de la sanidad animal, la salud pública y los ecosistemas a escala mundial.

Esta colaboración no debería limitarse solo a la esfera internacional, sino también traducirse en un nuevo paradigma fundamental a escala nacional.

Promover el enfoque colaborativo de "Una sola salud” a escala nacional resultará en un mayor y duradero respaldo político encaminado a lograr un enfoque más colaborativo y coordinado en la prevención de las enfermedades que tienen un gran impacto en la salud pública y animal en la interfaz entre humanos y animales.

Para promover este planteamiento, la OIE colabora estrechamente con la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en lo que se conoce como una ‘Alianza tripartita’, cuyo objetivo es coordinar actividades para encarar los riesgos sanitarios en la interfaz hombre-animal-ecosistemas, con la meta de prevenir los riesgos para  la sanidad animal y la salud pública que se derivan de las zoonosis y de las enfermedades animales con un impacto en la seguridad alimentaria.

En 2010, las tres organizaciones redactaron y publicaron una nota conjunta sobre este concepto reafirmando objetivos y responsabilidades dentro de esta asociación tripartita. En la actualidad, la alianza sigue ampliándose, desarrollando y divulgando liderazgo y conocimientos técnicos para dar prioridad a  los asuntos de sanidad animal y salud pública, en particular la influenza zoonótica, la rabia y la resistencia a los agentes antimicrobianos como puntos de entrada para reforzar la colaboración entre los servicios de salud pública y la sanidad animal a nivel nacional.

La alianza tripartita ha establecido vínculos sólidos y directos con ministerios nacionales responsables de la salud pública y la sanidad animal, a través de los cuales defiende que se siga promoviendo la implementación y armonización de las normas, reglamentaciones, directrices y recomendaciones intergubernamentales.

Dentro de los esfuerzos recientes encaminados a identificar actividades concertadas y brechas en la gobernanza de la sanidad animal, y haciendo referencia a la evaluación y los resultados de las misiones del Reglamento Sanitario Internacional (RSI) de la OMS y del Proceso de evaluación de las prestaciones de los servicios veterinarios de la OIE (PVS), en 2014, las dos organizaciones llevaron a cabo talleres en Azerbaiyán y Tailandia. Estos seminarios se centraron en las perspectivas de los países resultado de las evaluaciones RSI y PVS, y en una hoja de ruta para una mejor colaboración intersectorial entre la sanidad animal y salud humana, que buscan consolidar la seguridad sanitaria.

Aún más, la OMS y la FAO redactaron un marco operativo para la buena gobernanza en la interfaz hombre-animal que busca reunir las herramientas de evaluación de las competencias nacionales de la OMS y de la OIE. Esta guía ofrece un panorama completo y de sinergia que los Países Miembros deberán utilizar para desarrollar un sistema coherente de gobernanza sanitaria nacional en la interfaz hombre-animal.